Hace pocos años ha nacido una disciplina, la Astrocultura, que debería tener en la mira aplicaciones platillistas a ciertos ornamentos o filigranas gráficas menores de gran circulación, como las estampillas o los sellos postales.
Todo lo que debe empezar, en algún momento empieza. John Rimmer, antiguo director de la longeva y fenecida revista Magonia y actual editor del sitio sucesor, Magonia Review/Pelicanist, acaba de publicar un panegírico de “An Alien in My Mailbox» de Luis R. González (Ed. Coliseo Sentosa, 2021).
Addenda: en 2024, Coliseo Sentosa publicó la primera edición, corregida y aumentada, en idioma castellano. Y en dos tomos. ¿Bajo qué título? “Un marciano en mi buzón”. Ya está disponible el primer volumen. Más información, al pie de esta reseña.
Por John Rimmer
Los seguidores habituales de Magonia Review sabrán que de vez en vez convoco a la atención de nuevas emisiones de sellos de correos con temas de interés. A menudo representan leyendas y folclore, o criaturas míticas y criptozoología. De las respuestas que he recibido se desprende que existe una gran comunidad de filatelistas con intereses forteanos.
Ahora, uno de los principales ufólogos hispanos asumió la tarea de catalogar y revisar los sellos y otros artículos filatélicos de temática ufológica, y también de recoger los aspectos de la ciencia y la ciencia ficción relacionados con la ufología y los viajes espaciales especulativos en todo el mundo. El libro surgió de una serie de artículos de Luis R. González en la revista española El Escéptico, bajo la cabecera “Un marciano en mi buzón”. Este libro en inglés es la versión extractada de una próxima edición española, que incluirá sendos catálogos de sellos de Star Trek y Star Wars.
Es importante que este estudio haya sido realizado por un ufólogo de España, donde tuvo lugar el misterioso affaire UMMO, en el que los mensajes de los supuestos extraterrestres llegaban a los receptores a través del servicio postal.
El propio González contribuyó al affaire en 2015, con toda una serie de sellos personalizados
«El autor de este libro protagonizó hace algunos años un momento álgido del platillismo postal: envió varias postales ummitas vehiculizadas con unos raros sellos de cosecha propia para promover el libro de Reinaldo Manso “Ummo. Historia de una obsesión” (2015).»
El autor sitúa el primer sello postal específicamente relacionado con los ovnis en 1975, en una emisión de Guinea Ecuatorial que conmemoraba la colaboración entre Estados Unidos y la URSS en la investigación espacial. Estas piezas mostraban figuras como Yuri Gagarin y John Glenn y otras de hardware científico. Pero los dos sellos de mayor valor facial llevaban la inscripción “Colaboración interplanetaria”. Uno de ellos mostraba una versión mejorada del tradicional platillo de Adamski, junto con un par de ovnis tipo Arnold, con añadidos como estelas de chorro. El otro sello mostraba un OVNI con forma de Saturno, también mejorado con lo que parecen ser motores a reacción. Este sello no se parece a ningún informe conocido sobre ovnis, pero el trabajo detectivesco de González ha rastreado la imagen hasta un cómic francés.
El segundo país que emitió un sello ufológico fue el pequeño estado insular de Granada, en el Caribe. Esta emisión de 1978 tuvo, al menos, cierta relevancia para el país que la emitió: el entonces primer ministro, Eric Gairy, era aficionado a los ovnis y consiguió convocar una audiencia de las Naciones Unidas sobre el tema, a la que asistieron varias luminarias de la ufología, como Jacques Vallée y Josef A. Hynek (¡pero no, por desgracia, éste su humilde crítico!).
Aquello no ayudó mucho a la suerte política de Gairy, depuesto al año siguiente. Vale la pena señalar que sobre el caso han surgido varias teorías conspirativas, suponiendo que la invasión de la isla por parte de los Estados Unidos era para deponer a Gairy, quien estaba a punto de revelar la verdad sobre los ovnis. En realidad, la invasión se produjo cuatro años después, en 1983, para deponer al entonces nuevo primer ministro, el marxista Maurice Bishop.
Esta fue probablemente la primera y última vez que un país tuvo una razón legítima para emitir una serie de sellos sobre ovnis, lo que habría terminado este libro en la página 25. Afortunadamente, un gran número de países –y de hecho, países potenciales, países que podrían haber sido, y países que nunca fueron– tuvieron muy buenas razones para emitir sellos ufológicos, por ejemplo para ayudar a engrosar las arcas de la autoridad emisora.
Una forma de incluir el tema ovni en los sellos fue conmemorar a un famoso escritor de ciencia ficción, lo que dio a la mayoría de los países francófonos la oportunidad de emitir sellos con todo tipo de objetos voladores fantásticos bajo la etiqueta de Julio Verne. Una interesante serie de sellos de Israel, que conmemoraba una convención de ciencia ficción (que no llegó a realizarse), vinculaba hábilmente diversas obras de la temática con aspectos de la Biblia y la tradición judía. Por ejemplo, relacionaban las naves espaciales de Verne con el carro de Ezequiel, un clásico de los “ovnis históricos”, y los robots de Asimov con la leyenda del Gólem.
Como he sugerido, muchos sellos referidos a ovnis y temas relacionados provienen de autoridades postales que son, como mínimo, discutibles. Tras la desintegración de la Unión Soviética, surgieron una serie de “entidades emisoras de sellos” con muy poca autoridad. En el capítulo titulado “La gran oleada postal ovni”, el autor cataloga cientos de estos “sellos” con muy poco valor postal o artístico.
Algunos pueden haber sido emitidos bajo la autoridad de un gobierno regional o escindido, pero la mayoría parece haber sido producida por especuladores con poca o ninguna conexión con el lugar cuyo nombre estaba impreso en ellos, y pocos o ninguno salieron a la venta en ese territorio. Incluso si un sello lleva impreso el nombre de un país legítimo, no hay garantía de que tenga valor oficial. En este catálogo, las emisiones falsas se señalan con un número de referencia impreso en rojo, a diferencia del símbolo verde de los sellos emitidos por entidades reconocidas oficialmente.
Pero incluso las emisiones legítimas, autorizadas por un país real, son producidas, en su mayoría, por agencias filatélicas que firman contratos con estados pequeños y a veces empobrecidos. Producen sellos con temas que no tienen ninguna relación con el estado cliente, pero que pueden atraer a coleccionistas de Europa, América y, cada vez más, a China. En un apéndice leemos una entrevista con un diseñador de sellos que trabajó para varios gobiernos y agencias filatélicas y da una idea de las maquinaciones detrás de estas emisiones.
Pero las series escandalosamente explotadoras no son únicamente competencia de las naciones empobrecidas del Tercer Mundo. Los numerosos sellos, hojas sueltas, folletos y otras fruslerías emitidos por el Royal Mail británico para explotar la franquicia de Star Wars, son vergonzosos. Hay muchos otros países que deberían escarmentar. Australia, por ejemplo.
Sin embargo, aunque muchos sellos son producciones especulativas para el mercado de los coleccionistas, algunos están bien producidos y son interesantes, y a veces intentan dar una impresión precisa del fenómeno y no están afligidos por valores faciales ridículamente altos. Me gusta especialmente una serie de Tanzania que muestra representaciones razonablemente precisas –aunque retocadas– de ovnis tomados de casos reales. Este tipo de coleccionismo debe ser presidido por la famosa advertencia: caveat emptor (el comprador debe proceder con cuidado); este libro le ayudará a hacerlo.
González hizo un intrigante trabajo detectivesco. Así, halló los orígenes de muchas de las imágenes usadas en los sellos, ora remontándose a versiones distorsionadas de informes reales, ora a la portada de un libro de bolsillo o a un cómic.
Una imagen que me intrigó, interesante porque demuestra la rápida difusión de la imaginería ovni en la cultura popular, es un sello souvenir no postal emitido en 1951 para el Festival of Britain. Destinados a recaudar fondos para la organización benéfica Greater London Fund for the Blind, el sello de tres (antiguos) peniques representa el edificio de la exposición itinerante del Festival que recorrió el país, con un ovni gigante en forma de platillo que se cierne sobre la estructura y que envía algún tipo de rayo de fuerza, sin duda festivo, hacia abajo.
Este libro no es sólo para coleccionistas de sellos: prueba la apasionada dedicación del autor al tema. Luis R. González ha producido una guía, un catálogo y un manual que recomiendo de corazón a todos los coleccionistas que navegan por esta rama de la filatelia y a los interesados en cómo historias e imágenes del fenómeno ovni se transmiten en la cultura popular.
El volumen está bellamente producido, cada página está repleta de reproducciones en color de alta calidad. Está publicado en España y se presenta en tres versiones: dos a todo color en tapa dura y rústica, y otra en blanco y negro sólo en rústica. Las tres están disponibles a través de Amazon [enlaces abajo].
Una excelente adición a cualquier biblioteca filatélica o ufológica.
Fuente: La versión original en inglés del artículo de Rimmer llevó por título “Hacer ufología filatélica”. Fue publicada el 20 de junio de 2022 en Pelicanist.
Clasificación: 1 meñique fracturado: pésimo. 1 meñique: malo. 2 meñiques: regular. 3 meñiques: bueno. 4 meñiques: muy bueno. 5 meñiques: excelente.UN MARCIANO EN MI BUZÓN, DISPONIBLE EN CASTELLANO
El Vol. 1 de la edición en castellano de AN ALIEN IN THE MAILBOX, editado por Coliseo Sentosa, ya está disponible para los interesados. Ofrece mucho material inédito en la edición en inglés. Por un lado, se han corregido errores y se ha actualizado la documentación hasta finales de 2023. Por el otro, se ha dividido en dos tomos y añadido varios capítulos nuevos sobre sellos de ciencia ficción y escepticismo, así como un monográfico sobre sellos personalizados de UMMO y un catálogo sobre estampillas dedicadas a los distintos tipos de telescopios espaciales, alcanzando las 1200 ilustraciones a todo color. Autor: Luis R. González / Año de edición: 2024 / Prólogo: Giancarlo D’Alessandro / Número de páginas: 324 / Ilustrado, edición a color / Ediciones Coliseo Sentosa
INTRODUCCIÓN – Mis exposiciones
PARTE 1 – OVNIS Y SETI
CIENCIA FICCIÓN Y OVNIS + Insertos 1 y 2 (“ARTHUR C. CLARKE” y “ISAAC ASIMOV”)
PLATILLOS VOLANTES Y OVNIS
OVNIS Y FENÓMENOS NATURALES
¿BASES ALIENÍGENAS? + Inserto 3 (“LA CARA MARCIANA”)
OVNIS MUY TERRESTRES
FOTOS E ILUSTRACIONES DE OVNIS
ASTROARQUEOLOGÍA Y OTROS MISTERIOS
EMISIONES CONMEMORATIVAS Y SELLOS PERSONALIZADOS + Inserto 4 (“UMMO”)
OTROS COLECCIONISMOS + Inserto 5 (“UFO Museum”)
EXOPLANETAS Y SETI + Insertos 6, 7 y 8 (“CARL SAGAN”, “STEPHEN HAWKING”, “RICHARD FEYNMAN y NIKOLA TESLA”)
EL TELESCOPIO HUBBLE Y LA FILATELIA
OTROS TELESCOPIOS ESPACIALES EN LA FILATELIA
PARTE 2 – ALIENÍGENAS Y ABDUCCIONES
ALIENÍGENAS
ABDUCCIONES + Inserto 9 (“Las abducciones en España”)
COMICS Y ALIENÍGENAS PARA NIÑOS
ALIENÍGENAS EN COMICS Y NOVELAS GRÁFICAS + Inserto 10 (“Superman”)
CINE + Inserto 11 (“2001 – Una odisea del espacio”)
TELEVISIÓN + Inserto 12 (“Expediente X”)
SAGAS GALÁCTICAS EN LA FILATELIA:
STAR TREK
STAR WARS
APÉNDICE – ESPACE LOLLINI
GLOSARIO DE TÉRMINOS Y PERSONAJES UFOLÓGICOS PARA NO INICIADOS
CÓMO ADQUIRIRLO
Información sobre cómo comprar la edición en castellano
Información sobre el libro y puntos de venta virtuales, en inglés.
Venta en Amazon.com, con envíos a México, Centroamérica y Sudamérica:
Edición en tapa dura a color:
Edición en rústica a color:
Edición en rústica en blanco y negro:
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