Alejandro Martín López junto al meteorito “El Chaco”.

Mística meteorítica: antropología de las manifestaciones celestes

¿Qué tiene para enseñarnos el cielo sobre nosotros mismos? Hay un campo de conocimiento que no tiene nada que ver con la astrología ni con la ufología ocupándose seriamente de eso: la Astronomía Cultural, un área interdisciplinaria dedicada al estudio de las concepciones, percepciones y prácticas referentes a lo celeste de los diversos grupos humanos de ayer y de hoy. En la Argentina, uno de sus referentes, el Dr. Alejandro Martín López, antropólogo, astrónomo e investigador del CONICET, acaba de anunciar que el próximo 7 de abril comienza el primer curso oficial de Astronomía en la cultura en la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata.
López ahora estudia cómo los meteoritos del Gran Chaco influyeron e influyen en la cultura de los pueblos originarios. Por sus trabajos entenderemos cómo estos fragmentos “caídos del cielo” cambian de significado según quién sea su descubridor. Será un elegido el aborigen que la encuentre o será un saqueador el extranjero que se lo lleve, por ejemplo.
“Muchos movimientos de reclamos por sus derechos se organizaron alrededor de los meteoritos”, cuenta López, para quien los meteoritos son una metáfora de las desigualdades existentes.

Por Cecilia Leone (*)

Alejandro Martín López junto al meteorito “El Chaco”.
Alejandro Martín López, astrónomo cultural, junto al meteorito “El Chaco”.

Hace unos 4.000 años un enorme cuerpo metálico proveniente del espacio entró en la atmósfera terrestre y se fracturó mientras caía. Sus fragmentos se esparcieron a lo largo de una larga franja de unos 100 kilómetros de largo por 3 kilómetros de ancho en una región que se conoce actualmente como “Campo del Cielo”. Esta zona se caracteriza por el tamaño y la alineación de sus cráteres, y por la presencia de una gran cantidad de fragmentos meteóricos con alto de gran masa y contenido de hierro, entre los que se destaca el meteorito “El Chaco”, el segundo más grande del mundo y que pesa 37 toneladas.

Ale Lopez
POR QUÉ ALEJANDRO MARTÍN LÓPEZ. Doctor en Antropología por la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Buenos Aires; López es Magister en Antropología por la Universidad Nacional de Córdoba y Licenciado en Astronomía de la Universidad Nacional de La Plata. Desde 1998 realiza investigaciones en etnoastronomía, arqueoastronomía y etnomatemática en grupos aborígenes chaqueños, especialmente entre los mocoví. En estos mismos grupos realiza investigaciones sobre la experiencia religiosa y los procesos de misionalización cristiana. De 2004 a 2008 coordinó el Programa de Astronomía Cultural del Planetario Galileo Galilei de la Ciudad de Buenos Aires, dictando allí el primer curso de Astronomía Cultural en la Argentina: “El cielo y la cultura: etno y arqueoastronomía”, y desarrolló el primer espectáculo para planetarios sobre astronomía aborigen en la Argentina: «Nayic Moqoit. El camino de los mocovíes». Hoy es investigador de CONICET, en la Sección de Etnología del Instituto de Ciencias Antropológias de la FFyL y docente del primer curso oficial de de Astronomía Cultural en la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).

Alejandro López es astrónomo, antropólogo e investigador adjunto del CONICET en el Instituto de Ciencias Antropológicas de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad de Buenos Aires y desde 1999 estudia junto a su grupo las ideas sobre el cielo de los grupos indígenas chaqueños, en particular las relaciones de estos grupos con la dispersión meteórica de Campo del Cielo.

A partir del trabajo en campo y fuentes documentales exploran los conocimientos y prácticas de estos grupos en relación con los meteoritos, a los que la literatura previa hacía referencia de forma confusa y anecdótica, para buscar conocer cómo estas sociedades se vinculan con su entorno y los seres que lo habitan.

Específicamente se centraron en la comunidad mocoví (moqoit) -grupo que pertenece al tronco lingüístico guaycurú y habitaban la zona sur del Gran Chaco donde vivían de la caza y la recolección-. Actualmente, según datos de la Encuesta Complementaria de Pueblos Indígenas (ECPI) 2004-2005, se reconocen y/o descienden en primera generación del pueblo mocoví 12.145 personas en las provincias de Santa Fe y Chaco.

Trabajo-de-Campo
ASTRONOMÍA CULTURAL, RARA INTERDISCIPLINA. El próximo 7 de abril comienza el primer curso oficial de Astronomía Cultural en la Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas de la Universidad Nacional de La Plata. Estos son los detalles: Seminario de grado y materia de Postgrado, introducción a la astronomía en la cultura Duración: primer cuatrimestre de 2016. Lugar: Observatorio de La Plata, aula K. Horarios: lunes y jueves de 15 a 17. Docentes: Dra. Cecilia P. Gómez (CONICET, Instituto de Ciencias Antropológicas, Facultad de Filosofía y y Letras, UBA); Lic. Sixto R. Giménez Benítez (Facultad de Cs. Astronómicas y Geofísicas. UNLP); Dr. Alejandro López, CONICET, Instituto de Ciencias Antropológicas, Facultad de Filosofía y y Letras, UBA, Bs. As.); Dr. Antonio César González García (Instituto de Ciencias del Patrimonio. Consejo Superior de Investigaciones Científicas, España.); Mg. José Luis Pino Matos (Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, Perú.), Lic. Gustavo M. Corrado, (Facultad de Cs. Naturales y Museo, UNLP). Contacto: sixto@fcaglp.unlp.edu.ar                                                                                             En la región los astrónomos culturales están nucleados en la SIAC (Sociedad Interamericana de Astronomía en la Cultura), que acaba de hacer la convocatoria de trabajos para la V Escuela y IV Jornadas Interamericanas de Astronomía Cultural, que se realizarán del 10 al 15 de octubre de 2016 en San Cosme y Damián, República del Paraguay.

“Para los mocovíes el cosmos está poblado de diferentes sociedades de seres no-humanos con los que es imprescindible pero peligroso relacionarse. El espacio celeste es una parte integral y muy importante de su mundo ya que de allí proviene la abundancia y la fecundidad de la Tierra. El cielo mocoví está organizado alrededor del Nayic o ‘camino’, que la astronomía académica llama Vía Láctea, y que es una zona del cielo que se observa como una gran franja de brillo difuso y alrededor de la cual se organiza el espacio celeste mocoví. A lo largo de la misma se disponen los rasgos más importantes, que incluyen estrellas, grupos de ellas, manchas brillantes y oscuras. El brillo es una de las manifestaciones características de los seres con poder, y es por eso que la Vía Láctea se piensa como una región especialmente potente”, destaca López.

En este contexto los meteoritos tienen una gran importancia para este grupo: son vistos como estrellas que caen del cielo y anuncian lluvias y además concebidos como objetos productores de suerte y riqueza, ya que son la manifestación de la presencia material en la Tierra de los poderosos seres del cielo. Se trata por ello de objetos cargados de potencia y cuya manipulación es peligrosa, pero que además están asociados – junto con otros objetos – a la construcción de liderazgo.

“Se piensa que los fragmentos meteóricos se entierran profundamente al caer y van emergiendo lentamente del suelo para aparecer en la superficie ante aquellas personas para las que están destinados. Por ello la extracción de meteoritos por parte de criollos y extranjeros funciona muchas veces como símbolo de la situación general de despojo de sus recursos a los que estos grupos fueron sometidos desde la ocupación de sus territorios y su sedentarización forzada. Los meteoritos cumplen el rol de íconos de la identidad para estas comunidades. El interés que despiertan en los no aborígenes es para muchos una metáfora de las desigualdades existentes. Es por ello que, en el último tiempo, muchos movimientos de reclamos por sus derechos se organizaron alrededor de los meteoritos”, advierte López.

El equipo de investigación también aborda las prácticas e ideas de diversas comunidades de criollos y migrantes europeos. En particular exploran los complejos procesos de intercambio y disputa de saberes entre todos estos grupos. En el caso particular de las ideas sobre los meteoritos, mientras la convicción de los pueblos originarios sobre el origen celeste de los mismos fue registrada ya en tiempos coloniales, los astrónomos académicos europeos no consideraron seriamente esa posibilidad hasta fines del siglo XVIII.

nandu celestial
ÑANDÚ CELESTIAL. Para diversas sociedades sudamericanas, las manchas oscuras que se distinguen en la Vía Láctea constituyen importantes rasgos del cielo. Los pueblos andinos ven en ellas una llama con su cría y otros poderosos seres con forma animal. Muchos grupos chaqueños, como los mocovíes y los tobas, ven allí un enorme ñandú celestial, el dueño de esa especie. En la concepción mocoví, la Vía Láctea es un sendero a lo largo del cual se despliegan los relatos míticos clave de esa cultura chaqueña. Los chamanes se cruzan con los seres poderosos que dominan el cosmos mocoví. Las disposiciones del cielo proporcionan a los mocovíes reloj y calendario y direcciones de referencia para organizar el espacio terrestre.
meteorito adolfo
Meteorito «Adolfo». Lugar: «Campo del Cielo. Peso: 9,760 kg. Desenterrado: 12-09-2008. Fuente: Mindat.

“Cuando se estudian las ideas de los grupos de pueblos originarios sobre el cielo es importante comprender que todas las sociedades cambian. No obstante, el análisis comparativo entre las etnografías actuales y los testimonios del pasado, tanto documentales como arqueológicos, nos sugieren la continuidad de importantes elementos. Entre ellos la idea de un cosmos poblado por diversas sociedades de seres humanos y no-humanos, la del cielo como un espacio de abundancia y poder y la de que los meteoritos constituyen una presencia en la tierra de las entidades celestes. Estas concepciones son muy relevantes hoy, aún en el contexto de los cristianismos aborígenes contemporáneos”, aclara el investigador.

Según López, la educación astronómica ofrece un espacio interesante de interacción entre las concepciones académicas y las de los pueblos originarios. La tradición de observación del cielo a simple vista de los grupos tiene un enorme potencial formativo e integra la observación de distintos fenómenos y ciclos astronómicos con rasgos del paisaje, ciclos vegetales y animales y la memoria comunitaria. Y agrega: “El trabajo intenso de los maestros y auxiliares bilingües mocovíes estimula el diálogo entre jóvenes y ancianos, lo cual abre un espacio importante para compartir conocimientos”.

(*) Fuente: Del cielo a la Tierra, Conicet

ENLACES EXTERNOS
Los cielos de la humanidad. ¿Qué es la astronomía cultural? Por Alejandro López y Sixto Giménez Benitez en Ciencia hoy Nº 116
Astronomía Aborigen del Chaco: Mocovíes I. La noción de nayic (camino) como eje estructurador. Por Giménez Benítez Sixto, López Alejandro Martín, Granada Anahí (Facultad de Ciencias Astronómicas y Geofísicas , Universidad Nacional de La Plata).
Sociedad Interamericana de Astronomía en la Cultura (SIAC)
Los suicidas mágicos del cerro Uritorco (Entrevista en la TVP al Dr. Alejandro López)

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El que prescribe

Alejandro Agostinelli, editor de este blog, es periodista desde 1982.

Fue redactor de las revistas Conozca Más, MisteriosEnciclopedia Popular Magazine Gente, y de los diarios La prensaPágina/12. Fue uno de los impulsores de la Fundación CAIRP y escribió y asesoró a la revista El Ojo Escéptico. También fue productor de televisión en Canal 9 y América TV. Fue secretario de redacción de las revistas de divulgación científica Descubrir NEO y fue editor de una docena de colecciones de infomagazines para la revista Noticias y otras de Editorial Perfil. Últimamente ha colaborado en las revistas Pensar, publicada por el Center For Inquiry Argentina (CFI / Argentina), El Escéptico y Newsweek.

Fue creador del sitio Dios! (2002-2004) y del blog Magia crítica. Crónicas y meditaciones en la sociedad de las creencias ilimitadas (2009-2010). Es autor de Invasores. Historias reales de extraterrestres en la Argentina (Random House, 2009).

Asesoró a Incoming, el noticiero de Canal Infinito (2009-2011) y escribió la columna Ciencia Bruja en Yahoo! Argentina y Yahoo! español (2010-2012). Asesoró a las productoras SnapTv y Nippur Media en la producción de documentales históricos y científicos para NatGeo (2011-2013).

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