Una isla que no figura en los mapas, una supuesta comunidad que promete curaciones milagrosas y contactos extraterrestres, y un relato cada vez más difundido. El periodista e investigador Patricio Abusleme Hoffman revela cómo se construyó, promovió y vendió el mito de la Isla Friendship.
Patricio Abusleme acaba de lanzar El secreto de Isla Friendship, un extenso monográfico que desentraña uno de los mitos más intrigantes amanecidos en el Chile de los años 80: el enigma de la isla Friendship y su supuesta hermandad extraterrestre. En más de 500 páginas, y con material hasta ahora inédito, el escritor expone con rigor, documentación y entrevistas cómo este relato fue, en realidad, un fraude cuidadosamente construido por uno de sus principales divulgadores.
Gracias a la generosidad de Patricio, compartimos en exclusiva el capítulo 6 del libro, “Friendship sale al mundo”, como adelanto de una obra que promete renovar el debate sobre una grandes historia del imaginario plativolista latinoamericano.
En 2023 abordamos esta historia a propósito de “Isla Alien”, el documental de Netflix.
Después de lo que pareció ser un incremento en las comunicaciones radiales con Friendship en el período entre fines de 1988 y 1989, estas fueron decreciendo paulatinamente y terminaron alrededor de 1995.
Hasta ese momento, los relatos sobre la isla Friendship solo eran conocidos por un puñado de oncemetristas (*), algunos de sus amigos y familiares cercanos, y también por algunos ufólogos chilenos.
Pero la siguiente etapa de esta historia comenzó en 1998, cuando la narrativa sobre los señores del sur austral fue divulgada por los medios de comunicación, por lo que pasó a ser conocida por la opinión pública.
Para ser justos, hay que decir que el asunto probablemente fue tratado con anterioridad en programas de radio, como el recordado Saludando la noche de Radio Portales, donde el locutor Patricio Varela daba cabida a estos temas en el segmento «Mundo Espacial» [1].
La primera mención que yo recuerdo sobre esta historia fue en un reportaje del programa Informe Especial, de Televisión Nacional de Chile (TVN), a cargo del periodista Marcelo Araya. Vi ese programa durante mi adolescencia y lo grabé en un cassette de VHS, pues en aquella época yo ya estaba interesado en la ufología con ese entusiasmo, energía e ingenuidad que solo da la juventud.
OCTAVIO ORTIZ. El contactado por Friendship, entrevistado en OVNI, junio de 1999.
Aunque el contenido de ese reportaje no era exclusivamente sobre Friendship, sino que trataba de distintas facetas sobre el fenómeno OVNI en Chile y también en el exterior, había una parte donde, según yo recordaba, había aparecido como entrevistado Octavio Ortiz, quien había hablado sobre la tragedia del transbordador Challenger.
Hace algunos años me di el trabajo de examinar y digitalizar las cintas de VHS que estaban guardadas en la casa de mi padre, algunas de las cuales databan de mediados y fines de los ochenta.
Por eso, para mí fue una grata sorpresa encontrar y digitalizar ese reportaje de Informe Especial [2], donde comprobé que el entrevistado no era Ortiz, como yo mal recordaba, sino Daniel Morales, el oncemetrista de la estación «Centauro», quien desde hacía años estaba viviendo en Ancud, en la Isla Grande de Chiloé.
En ese reportaje nunca pronunciaron la palabra «Friendship», sino que se refirieron a «una isla que estaría habitada por científicos humanos que mantendrían estrecha relación con seres extraterrestres» y que se contactaban por la radio de once metros.
A LA CAZA DE «CONTACTADOS». Uno de los primeros artículos publicados en la prensa chilena que mencionó a Friendship y a la visita de Josep Guijarro al país para investigar sobre el asunto. (Fuente: Las Últimas Noticias, lunes 13 de abril de 1998, p. 15).
Una cinta de audio llega a España
Raúl Germán Núñez Gálvez es un investigador chileno del fenómeno OVNI y de enigmas históricos, ya entrado en años, que elabora, edita y publica en forma gratuita y desde antes de 2010 su Noticiero Ufológico Autónomo (NOUFA).
Aunque volvió a radicarse en Chile alrededor de 2003, Núñez vivió por cerca de 30 años en Barcelona, España, adonde emigró durante la primera mitad de los setenta.
Después de llegar a España estableció contacto y entabló amistad con ufólogos del Viejo Continente, como los desaparecidos Antonio Ribera y Jordá, Andreas Faber-Kaiser y Salvador Freixedo, y también con algunos de los entonces jóvenes ovnílogos españoles, como Javier Sierra Albert y Josep Guijarro Triadó.
Durante sus años en Cataluña estuvo en comunicación con investigadores chilenos, como Jorge Anfruns Dumont, Aquiles Castillo Barrera y la señora Liliana Núñez Orellana, una de las primeras ufólogas de Chile.
Raúl Núñez mantuvo correspondencia con la señora Liliana Núñez —con quien comparte el primer apellido, pese a no estar emparentados en forma alguna— en una dinámica en que ella le enviaba noticias sobre OVNIs y recortes de prensa desde Chile y él le mandaba material desde España, incluyendo libros ufológicos editados en el país ibérico.
Durante la segunda mitad de los noventa tuve el privilegio de cultivar la amistad de la señora Liliana y en las dos o tres ocasiones que visité su casa en la comuna de Macul pude maravillarme ante su impresionante biblioteca ufológica, donde destacaban varios «incunables» muy difíciles de conseguir en Chile y que no he vuelto a ver en ninguna otra parte. Varios de esos libros eran producto de su correspondencia con Raúl Núñez [3].
En 1988 o 1989 [4], Núñez recibió en su casa en Barcelona de parte de la señora Liliana una cinta de audio vinculada al asunto Friendship. Como él algo había oído sobre el tema y los creía «contactados», guardó el cassette en su escritorio.
Pasaron un par de años y un día fue a dejarle unos artículos a Josep Guijarro a la revista Karma 7, en la que colaboraba con temáticas de Chile. Guijarro le comentó que ya no podían seguir publicando cosas sobre la Isla de Pascua y sobre mitología chilota, porque eran temas que ya habían tratado anteriormente. Le preguntó si no tenía algo nuevo, ufológico, y Núñez le contó sobre la cinta que tenía guardada en su escritorio y le propuso que la oyeran.
«Me invitó en la noche a su casa y mientras cenábamos, escuchamos esas cintas. Y yo vi cómo se le iluminó la cara», recordó Raúl Núñez durante una conversación telefónica con el autor. «Estuvimos revisando las cintas no sé cuánto tiempo y él se volvió loco con el tema de Friendship», agregó.
KARMA 7. Portada del número 292 de la revista española donde Josep Guijarro y Raúl Núñez publicaron el primero de sus artículos sobre la isla Friendship. «Escucha la voz de los extraterrestres», decía un texto en la portada porque la revista incluía un cassette con parte de la famosa grabación del 17 de agosto de 1985.
La exclusiva de Karma 7
Aunque quedó fascinado con la historia y con la cinta de audio de la conversación de los oncemetristas y Ariel mientras observaban al extraño visitante aéreo aquel sábado 17 de agosto de 1985, Josep Guijarro no pudo investigar sobre el tema en forma inmediata debido a la distancia que separa a España, en el sudoeste de Europa, de Chile, en el lado occidental del cono sur de Sudamérica, y los altos costos asociados a un viaje entre ambos países.
Sin embargo, el periodista, ufólogo y escritor chileno Cristián Riffo Morales, director de Ovnivisión Chile, invitó a Guijarro como expositor al Primer Simposio Internacional del Fenómeno OVNI que organizó en La Serena, en la Región de Coquimbo, en febrero de 1998. El periodista español, que entonces tenía 30 años, disertó sobre el caso Roswell [5], pero también aprovechó el viaje para recabar información sobre la historia de la isla Friendship.
Tanto en La Serena como en Santiago, Josep Guijarro compartió con el ovnílogo Jorge Anfruns, con el veterano ufólogo Hugo Hernán Pacheco Faúndez —que estaba implicado en el asunto Friendship desde que conoció a Ernesto de la Fuente a mediados de los ochenta— y con Rodrigo Fuenzalida, entre otros.
En abril de ese mismo año, Guijarro volvió a Chile, ahora financiado por la revista para la que trabajaba, para investigar más en profundidad el tema, ocasión en la que se entrevistó con Octavio Ortiz y su familia y viajó hasta Quemchi, en la Isla Grande de Chiloé, en una infructuosa búsqueda de Ernesto de la Fuente[6].
Durante ese viaje de abril de 1998, un reportero del diario Las Últimas Noticias publicó una nota sobre la presencia de Guijarro en Chile, en la que se refirió a la mítica isla quizás por primera vez en un medio de comunicación local, aunque escribió su nombre como «Friendschip»[7].
Guijarro atribuyó a la «inoportuna» publicación de ese artículo de prensa la cancelación de una reunión que tenía programada en el Congreso Nacional con el entonces senador designado y ex comandante en jefe de la Fuerza Aérea de Chile Ramón Vega Hidalgo (fallecido en mayo de 2014), uno de los responsables de la creación en octubre de 1997 del Comité de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos (CEFAA), actual Sección de Estudios de Fenómenos Aéreos Anómalos (SEFAA), dependiente de la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC).
Tras su segunda visita a Chile, Josep Guijarro volvió a España y en su número 292, correspondiente a junio de 1998, la revista Karma 7 publicó el primero[8] de una serie de artículos de su autoría —con la colaboración de Raúl Núñez y Cristián Riffo— sobre la historia de la isla Friendship. La revista hizo un seguimiento al tema con reportajes en sus dos números subsiguientes y lo retomó con nuevos artículos en 1999, 2000 y 2001.
De ese modo, la opinión pública tuvo acceso por primera vez al relato un poco más detallado sobre el tema, aunque fue a través de una revista «de nicho».
En ese primer artículo sobre Friendship, la revista Karma 7 incluyó un cassette de audio con la copia de la famosa grabación del 17 de agosto de 1985 con un texto en la portada que decía «Escucha la voz de los extraterrestres» y tras leer las primeras líneas ya aparecen algunas discrepancias importantes.
ERNESTO DE LA FUENTE. Durante la sesión de hipnosis que condujo el psicólogo Rigoberto Brito y fue emitida en OVNI, en 2001.
Por ejemplo, en ese reportaje Josep Guijarro le atribuyó la historia del faro Mitahues (que escribió como «Mitagüe») derechamente a Alberto (en vez de a Héctor, a quien también hizo alusión) y sostuvo que Ernesto de la Fuente fue quien conoció primero a la gente de Friendship y que él les recomendó los servicios de Alberto para aprovisionar a la isla.
Muy probablemente Guijarro escribió esa historia basándose en lo que le contaron terceros, como Octavio Ortiz, Hugo Pacheco y Rodrigo Fuenzalida, pues todavía no había logrado localizar y conversar con Ernesto de la Fuente. Pero, como vimos en los capítulos 1 y 4, el protagonista del incidente en el faro Mitahues fue Héctor (posteriormente Octavio Ortiz se enteró que Alberto se encontraba en las inmediaciones y que también fue testigo del fenómeno) y de acuerdo al testimonio de Ernesto de la Fuente, fue Alberto quien lo puso en contacto con los Friendship, y no al revés [9].
Quizás en reacción a esas publicaciones en España y a las críticas por haber aparecido primero en un medio extranjero y no en uno nacional, Cristián Riffo, el fotorreportero Jaime Tamayo Rubio —también de Ovnivisión Chile— y Roderick Bowen escribieron y publicaron artículos sobre Friendship en revistas nacionales, como Conozca Más, Ovnivisión y Revelación[10], en los que básicamente volvieron a contar lo mismo que Karma 7 y lo que hemos visto hasta ahora en lo que va de este libro.
De ese modo, la historia sobre la isla Friendship pasó a ser vox populi, pero su verdadera explosión mediática —y las consecuencias que esta trajo consigo— tuvo lugar un año más tarde, a mediados de 1999.
La primera emisión de OVNI
En la noche del jueves 17 de junio de 1999, Televisión Nacional de Chile (TVN) emitió el decimotercer episodio del programa OVNI, de la productora Nueva Imagen, que fue el último de la primera temporada de la serie. Ese capítulo se tituló «La isla de Friendship»[11].
Según el ufólogo Rodrigo Fuenzalida, que fue asesor de la productora en la realización de la ahora serie de culto, aquel capítulo fue prácticamente «de relleno» porque ya se les habían agotado los temas ufológicos para cubrir[12].
Por eso, el director de OVNI, Rodrigo Moreno del Canto, le preguntó qué historia podrían tomar y Fuenzalida comentó sobre el asunto Friendship. A Moreno le gustó la idea y procedieron con las entrevistas e investigación para armar el capítulo.
En el episodio relataron quizás por primera vez para la televisión en forma un poco más detallada los contactos radiofónicos de la estación Lucero con Ariel durante el avistamiento del 17 de agosto de 1985 y entrevistaron a Octavio Ortiz. También localizaron a Ernesto de la Fuente, quien estaba viviendo en Freirina, en la Región de Atacama, y él accedió a una entrevista, en parte por una antigua amistad personal con el conductor del programa, Patricio Bañados.
De la Fuente relató que a fines de los ochenta se enfermó de un cáncer terminal de pulmón y que sus amigos de la isla Friendship lo habían invitado a visitarlos, cosa que hizo y de donde salió recuperado.
También conversaron con el marino Jorge Luis Kramp, quien aseguró haber visto en 1992 una embarcación llamada Mytilus II con lo que parecían ser extranjeros o «no chilenos» a bordo, cuando recaló en Melinka. Según Kramp, como el barco iba de paso, no quedó un registro en el puerto.
El equipo de Nueva Imagen visitó gobernaciones marítimas y capitanías de puerto en Chiloé para preguntar por registros del barco, pero no encontraron ninguno[13]. También viajaron en un barco patrullero de la Armada de Chile a unas coordenadas que tenían para la supuesta localización de Friendship, pero no pudieron llegar por el mal clima.
El episodio terminó con un toque surrealista, con la producción visitando en Santiago al conocido tarotista Eduardo Godoy, quien les dijo que los marinos de la Armada los habían llevado «adonde quisieron» y que uno de los que navegaba con ellos sabía sobre Friendship o su localización.
Como imaginará el lector, esa emisión de OVNI tuvo un gran impacto en la opinión pública, mucho mayor que el de los artículos de Karma 7 y los posteriores publicados por revistas chilenas. Mucha gente vio y todavía recordaba al OVNI del 17 de agosto de 1985 sobre Santiago y la zona central de Chile, pero no muchos sabían sobre el contacto radial simultáneo con el grupo de oncemetristas.
Y todos quienes han sufrido dolencias para las que no existe cura o han tenido a familiares con enfermedades terminales podrán comprender por qué mucha gente llamó a TVN para saber cómo contactarse o viajar a la isla, después de escuchar que Ernesto de la Fuente había sido sanado allí de un cáncer pulmonar.
Ese episodio marcó un hito, un antes y un después en la historia de la isla Friendship. El interés en el misterio austral volvió con nuevos bríos y entre un público mucho más amplio, posteriormente se reanudaron los contactos radiales y aparecieron nuevos personajes.
La segunda emisión de OVNI
El impacto del primer episodio de OVNI sobre la isla Friendship quedó patente de inmediato, de modo que el equipo productor hizo un seguimiento al tema y comenzó a trabajar en una segunda entrega sobre la historia.
De ese modo, el viernes 27 de octubre de 2000 Televisión Nacional de Chile (TVN) emitió «Regreso a Friendship» [14], el decimosegundo y último episodio de la temporada final de la recordada serie, en que entregó nuevos antecedentes y mostró qué había sucedido con el tema en el lapso de un año.
Al inicio, el conductor, Patricio Bañados, dijo que el caso Friendship se había convertido «en una leyenda contemporánea» y que en septiembre de 1999, pocos meses después de la emisión del primer episodio, habían comenzado nuevas comunicaciones con la isla. Sin embargo, Ariel, el líder de la misteriosa ínsula a mediados de los ochenta, había sido reemplazado por alguien que se hacía llamar «Emanuel».
Según el programa, en el verano (austral) de 2000 los oncemetristas que conversaban con los nuevos interlocutores de Friendship se agruparon en una comunidad llamada «Vanrash».
Algunos de los miembros de ese grupo eran Margarita Cariz, Marcelo Carvajal, Roberto Arancibia, Guillermo Arias, Héctor Portales, Miguel Ángel Jordán y Julio Moscoso, entre otros. Las conversaciones radiales tenían un tono religioso/espiritual y los Friendship les pusieron apodos bíblicos, como «Nazareno», «Verdadero», «Fiel» y «Belén».
Margarita Cariz explicó que mientras hablaba por radio sobre cosas personales, apareció alguien que llamó a su estación y la invitó a la frecuencia de 26.665 ciclos. Cuando ella le pidió que se identificara con su QRA/QRZ (nombre/nombre de su estación), él se identificó como «Emanuel», de la estación Friendship. Después de eso, Margarita Cariz comenzó a grabar y a transcribir la mayor parte de esos diálogos.
Guillermo Arias, en tanto, contó al programa de un encuentro personal que tuvo con Emanuel. Volvía a su casa desde el trabajo cerca de las dos de la madrugada, cuando su vehículo tuvo un desperfecto. Fue socorrido por Emanuel y otro personaje, quienes lo remolcaron directamente a su casa.
La producción del programa volvió a consultar a Octavio Ortiz, quien dijo que en un principio él y su esposa pensaron que las nuevas comunicaciones no tenían relación alguna con la isla e incluso estaban algo molestos porque creyeron que alguien estaba haciéndose pasar por Friendship. Pero después de unos meses, de mantenerse a la escucha y de empezar a intervenir y a preguntar, comenzaron a convencerse y Octavio dijo que «las cosas estaban calzando muy bien».
Al final del episodio anterior de OVNI dedicado a Friendship, el tarotista Eduardo Godoy dijo que la Armada conocía la ubicación exacta de la isla y que, por algún motivo, no quiso darla a conocer al equipo de producción.
Nueva Imagen intentó conocer la respuesta de la Armada ante esa afirmación, pero su solicitud de entrevista fue rechazada. Me imagino que a la Armada de Chile no le hizo gracia que en el programa anterior los hubieran acusado por televisión abierta y por boca de un tarotista de ocultar información.
Los productores del programa viajaron nuevamente a Chiloé y en el Servicio Agrícola y Ganadero de Ancud hablaron con un técnico agrícola del SAG llamado Alfonso Schulbach, quien dijo haber conocido una embarcación llamada «Mytilus» que prestaba servicios a esa institución.
La característica de esa lancha es que «era muy buena para la navegación». Databa de la década de 1950 y nunca quisieron darla de baja, sino que la reparaban, «porque era muy buena para andar en altamar». Alrededor de 1974 o 1975 la lancha fue rematada y se la habrían adjudicado «unos señores italianos».
En Chiloé encontraron por primera vez un registro que comprobaba la existencia de una embarcación llamada «Mytilus», de cerca de 13 metros de eslora, pero nada aún sobre una «Mytilus II», aunque no faltaron los testimonios sobre su existencia.
Un buzo mariscador de Quellón llamado Francisco Solís dijo que en agosto de 1997, como a medianoche y mientras iba navegando, vio pasar al Mytilus II. Lo describió como un barco «blanquito» y como «de pasajeros», de entre 15 y 20 metros de eslora.
En tanto, el pescador artesanal Abel Mancilla afirmó haber estado navegando una vez cuando recibió por radio un aviso de mal tiempo de parte de otra embarcación. Le pidió identificación tres veces y le respondieron que no se preocupara por eso, sino que buscara un puerto para recalar.
Al preguntar por el QRZ, le contestaron que era el yate Mytilus II. Según el hombre de mar, la otra nave dijo que estaban a una distancia de alrededor de una milla, pero que no pudieron detectarlos pese a llevar el radar encendido.
El reportaje denuncia sobre Vanrash
En Santiago, algunos miembros de Vanrash comenzaron a cuestionar los mensajes de Emanuel y de Exequiel, que era otro de los Friendship. Uno de ellos fue Roberto Arancibia Morales. En una ocasión, Emanuel dijo que la Virgen María había tenido un hijo antes que Jesús, tras lo cual Arancibia indagó en distintos cultos y religiones, hasta dar con la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, más conocidos como los Mormones, que sostenían esa misma creencia.
En un comienzo, Margarita Cariz creía en los mensajes, hasta que vio que uno de ellos estaba leído o calcado del Libro de Mormón. Entonces, Guillermo Arias, actuando como portavoz de Friendship, dijo que el grupo iba a tener estatutos y que sus miembros tendrían que pagar un diezmo, con él asumiendo como sacerdote.
Friendship también instruyó a los de Vanrash a tomar el material recopilado de las conversaciones para «preparar un libro». La mitad de las ganancias generadas por la venta del escrito sería destinada a los pobres y la otra mitad sería repartida entre «Verdadero» —es decir, Guillermo Arias—, «Belén» (Margarita Cariz) y «Nazareno» (Marcelo Carvajal, que en aquella época era el marido de Margarita).
A mediados de 2000, los productores de OVNI resolvieron utilizar un dispositivo llamado radiogoniómetro para determinar de dónde provenían las comunicaciones radiales de Emanuel, quien había expulsado del grupo a Roberto Arancibia tras enterarse de su escepticismo.
La noche del viernes 21 de julio de ese año, después de la emisión de un episodio de la serie, los miembros de Vanrash comenzaron a intercambiar opiniones por la radio y el equipo de Nueva Imagen, respaldado por Roberto Arancibia, siguió en un móvil la procedencia de las comunicaciones de Emanuel.
Como era de esperar, estas no provenían desde el sur austral, sino desde un pasaje en la comuna de La Cisterna, en Santiago.
Cuando el director de OVNI, Rodrigo Moreno, y el guionista del programa, Gilberto Villarroel, se acercaron al portón de la casa de donde se emitía la señal, descubrieron que se trataba de Guillermo Arias, que transmitía desde un vehículo al interior de la propiedad.
GUILLERMO ARIAS. De espaldas, Rodrigo Moreno del Canto, director de OVNI. Momento en que Arias fue expuesto públicamente como un fraude, en julio de 2000.
Los productores encararon a Arias y parte de ese intercambio fue mostrado en el programa. Pese a la contundente evidencia de que Emanuel era en realidad Guillermo Arias que hablaba desde La Cisterna, este lo negó todo, dijo que Emanuel estaba transmitiendo desde la isla Friendship utilizando un aparato pequeño que Arias tenía en el bolsillo, pero que se negó a mostrar, y el engaño quedó al descubierto.
Como consecuencia de lo anterior, algunos miembros de Vanrash, como Margarita Cariz y Miguel Ángel Jordán, abandonaron la agrupación, sumándose a Roberto Arancibia, que había sido expulsado. Pero un traspié como ese no iba a remecer la fe de los creyentes. En un reportaje [15] de Chilevisión Noticias de 2001 del periodista Eugenio Salinas, Guillermo Arias apareció nuevamente a la cabeza del grupo, con varios adeptos, incluyendo a Julio Moscoso, que también había sido entrevistado para OVNI.
He leído que con posterioridad Guillermo Arias probó suerte en México, sin mucho éxito, y en años más recientes incluso empezó a pregonar sus creencias a través de las redes sociales [16] y hoy existen por lo menos dos grupos en Facebook sobre Friendship que tienen ese cariz religioso.
Volviendo al programa, los productores de la serie fueron en busca de la isla por segunda vez. En esa ocasión recurrieron a los servicios privados del capitán de navío de origen checo Vaclav Novy, quien dijo que nunca había oído hablar sobre la isla Friendship, aunque una vez lo llamaron por teléfono desde Alemania para preguntarle sobre una secta o congregación religiosa que estaría ubicada en la zona del canal Williams, en la Región de Aysén.
Según Patricio Bañados, las coordenadas que tenía Nueva Imagen para la supuesta localización de la isla se las había dado alguien que a su vez decía haberlas recibido de «dos pilotos de una rama de las Fuerzas Armadas». Tras cinco días de navegación en la embarcación de Vaclav Novy y premunidos de un sistema de posicionamiento global (GPS, por su sigla en inglés), llegaron a las coordenadas, donde sólo había mar.
Hacia el final del programa, los productores volvieron a contactar a Ernesto de la Fuente, quien dijo que una de las repercusiones de su aparición en el primer episodio dedicado a Friendship fue que algunas personas averiguaron su teléfono y que lo habían llamado mucho buscando sanaciones. También aseguró que los Friendship habían visto esa transmisión.
De la Fuente aceptó una propuesta para someterse a una regresión hipnótica, para lo que viajó a Santiago en compañía de su esposa. El procedimiento estuvo a cargo del psicólogo Rigoberto Brito.
En la hipnosis, Ernesto de la Fuente empezó a hablar en «una lengua desconocida», que habría sido una promesa que no podía romper.
También mencionó a «los servidores de los ángeles del Señor», que son «nacidos de mujer», mientras que los ángeles del Señor vendrían «de afuera», tras lo cual citó el Libro del Génesis, capítulo 6, versículos 1-4, que dice que los «hijos de Dios» vieron que las hijas de los hombres eran hermosas y tomaron de entre ellas a las que quisieron y les engendraron hijos, descritos como «héroes de la antigüedad» y «hombres de renombre».
De la Fuente también relató algunas cosas que aseguró haber visto cuando visitó la isla Friendship, como unos «signos verdes» tridimensionales que corresponderían a un pasaje del libro bíblico «Hechos (de los apóstoles)», que contendrían predicciones sobre el futuro y que «todo está escrito en la Biblia».
Tras salir de la regresión, negó haber hecho algún pacto con Friendship y dijo que lo único que le pidieron fue no mentir y no lucrar con el tema.
(*) ONCEMETRISTA VS RADIOAFICIONADOS. Es un usuario de la banda de radio Ciudadana, también conocida como «Once Metros», que usa la banda de 27 MHz, cuya longitud de onda corresponde a aproximadamente 11 metros. Se suele usar esta banda para comunicaciones de corto alcance, con fines recreativos o para emergencias. Los radioaficionados, en cambio, tienen una licencia para operar estaciones de radio y se dedican a actividades como instrucción, comunicaciones interpersonales y estudios técnicos, a título personal y sin fines de lucro.
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REFERENCIAS
[1] Fuera de toda duda, el tema sí lo abordó Patricio Varela —y con Octavio Ortiz como invitado, pero en Radio Minería— el 7 y el 14 de septiembre de 1998, pues tengo en mis archivos los audios digitalizados de esos programas. Sin embargo, para esa fecha la historia de la isla Friendship ya había sido divulgada por una revista española, como veremos en este capítulo.
[2] Reportaje sobre OVNIs del periodista Marcelo Araya en Informe Especial, programa emitido a través de la señal de Televisión Nacional de Chile (TVN) el jueves 18 de octubre de 1990.
Ese reportaje se puede ver en YouTube:
[3] Hace ya varios años, la señora Liliana Núñez donó gran parte de su material ufológico, incluyendo recortes de prensa recopilados durante visitas semanales que hizo a la Biblioteca Nacional durante 10 años y también sus libros de ufología, a su gran amigo Aquiles Castillo.
[4] No existe claridad respecto a si esto ocurrió en 1988 o 1989, ni si se trató de un solo cassette o de varios. Por ejemplo, en un recuadro en un artículo de Josep Guijarro para Karma 7, Raúl Núñez escribió que «las misteriosas cintas grabadas aquel día 17 de agosto de 1985 en Santiago de Chile, fueron recibidas en Barcelona clandestinamente, en un ya lejano año 1989…», mientras que en un texto del propio Núñez para la revista Año Cero afirmó que «en 1988 recibí una cinta en mi casa de Barcelona con las comunicaciones captadas el 17 de agosto de 1985».
Véase GUIJARRO, Josep. «¿Quién se esconde tras Friendship?». Revista Karma 7, N° 295, septiembre de 1998, páginas 30-35. Página 34; y NÚÑEZ, Raúl. «Friendship: ¿Una guerra secreta por el poder mundial?». Revista Año Cero, N° 147, octubre de 2002, páginas 54-58. Página 55.
[5] Roswell quizás sea el caso ufológico más famoso del mundo y ya forma parte de la cultura popular. Dice relación con la supuesta caída de un OVNI con entidades humanoides en su interior a comienzos de julio de 1947 en un rancho a algunas decenas de kilómetros de Roswell, en Nuevo México, Estados Unidos. Tanto los restos del objeto como de sus ocupantes habrían sido recuperados por personal militar estadounidense.
La noticia sobre la «captura» de un «platillo volador» fue publicada por el periódico local Roswell Daily Record el 8 de julio de 1947, sólo para ser desmentida al día siguiente por la milicia estadounidense, que aseguró que los restos en realidad correspondían a un globo meteorológico.
De esa manera, el caso Roswell quedó casi olvidado por cerca de 30 años hasta que en 1978 ufólogos estadounidenses accedieron a uno de los testigos militares de 1947, tras lo cual se reanudaron las investigaciones de ovnílogos y agrupaciones civiles hasta que la historia alcanzó notoriedad pública a mediados de los noventa por la difusión del video fraudulento de una autopsia a uno de los supuestos seres recuperados. La popular serie de televisión Los Expedientes Secretos X también difundió el caso y contribuyó a su inserción en la cultura popular.
[6] Josep Guijarro no sabía que para aquella época Ernesto de la Fuente había vendido el fundo Taiquemó hacía casi una década y que luego de haber vuelto a vivir durante años a su parcela de Santa Ana de Chena, en la comuna de Maipú, en Santiago, en esos momentos ya estaba morando en Freirina, en la Región de Atacama.
[7] SOLÍS DE OVANDO, Lino. «A la caza de “contactados” con ET». Las Últimas Noticias, lunes 13 de abril de 1998, página 15.
[8] GUIJARRO, Josep, y NÚÑEZ, Raúl. «Radioaficionados contactan con OVNIs». Revista Karma 7, N° 292, junio de 1998, páginas 16-21.
[9] En el primero de los cinco videos sobre Friendship que Josep Guijarro subió a su canal de YouTube entre el 20 de febrero y el 19 de junio de 2022 (de los cuales el quinto está disponible sólo para los suscriptores de pago de su canal), cometió el error de decir que fue Alberto quien fue sanado de cáncer por Friendship en vez de Ernesto de la Fuente.
[10] Véase, por ejemplo, RIFFO, Cristián. «¿Extraterrestres en el sur de Chile?». Revista Ovnivisión, Año 2, Número 1, abril de 1999, páginas 8 y 9; TAMAYO R., Jaime. «Tras la huella de Friendship. Entrevista a Raúl Núñez». Revista Ovnivisión, Año 2, Número 5, septiembre de 1999, páginas 10 y 11; RIFFO, Cristián. «Extraños habitantes en Chiloé». Revista Conozca Más, Número 8, 1999, páginas 6-12; y BOWEN, Roderick. «Friendship, la otra cara del misterio». Revista Revelación, Año 4, Número 40, 1999, páginas 34-36.
[11] El episodio completo está disponible en el canal de YouTube de TVN:
[12] Véase, por ejemplo, las declaraciones de Rodrigo Fuenzalida a Nicolás Larraín en el programa Not News del canal Vía X en el siguiente enlace:
[13] Tal como notó el ufólogo Eric Martínez en un video en YouTube, en ese episodio de OVNI mostraron a uno de los marinos escribiendo erróneamente el nombre del «Mytilus II» en un computador como «Mitylus II», de modo que es posible que la búsqueda no haya arrojado resultados debido a eso. El propio Ernesto de la Fuente escribió erróneamente ese nombre en varios de sus artículos para Conexión OVNI y lo redactó en forma equivocada siempre en su propia edición de esos textos que hizo alrededor de 2011 y que compiló en un libro digital.
[14] El episodio está disponible en el canal de YouTube de TVN:
[15] El reportaje fue emitido por Chilevisión Noticias el martes 12 de junio de 2001 y está disponible en el canal de YouTube de Ediciones Coliseo Sentosa:
[16] ALCAYAGA, Sergio. «Arias 4.0». NOUFA N° 34, 1 de agosto de 2015. Sector de opiniones, páginas 51-52.
