“A 40 AÑOS VISTA. Homenaje a Esteban de la Foz de sus alumnos: Nacho Cabria, Marta Cerezales, Javier Ezquerra y Susana Reberdito”. Este es el nombre de la convocatoria que invita a la inauguración de la exposición el próximo 27 de septiembre, en la Fundación Bruno Alonso. A este blog le interesa destacar el desparpajo del antropólogo Cabria, quien se atreve a presentar en público lo que llama “mis pinturrachos”.
“Me da pudor enseñar en público estas cosas, pero claro que las puedes sacar en el blog”, habilitaba así la publicación de parte de su obra pictórica Ignacio Cabria García, licenciado en antropología cultural por la Universidad de Barcelona y Diploma de Estudios Avanzados (DEA) en antropología social por la Universidad Complutense de Madrid, a nada de la inauguración de la exposición de los viejos alumnos de Esteban de la Foz, el próximo 27 de septiembre a las 19 horas, en la Fundación Bruno Alonso, en Isaac Peral 1, Santander, España.
Nacho Cabria –amigo dilecto de Factor, y si esto es dicho con orgullo altivo y amor, como es el caso, mejor es decir entrañable– define a su obra como “ilustraciones”.
Ojalá nos permita estirar el asunto y objetar su afirmación: quizá son algo más. “Hice la sirena de papel maché sobre una botella de Coca-cola atravesada por un trozo de manguera”, explica. “No podía ser menos, cómo yo no iba a tener mi propia sirena o Jenny Haniver. La foto la hizo Óscar Losa para El Diario de Cantabria, un periódico digital.”
Fuimos muchos los que empezamos a disfrutar de sus textos entre los años ’80 y ’90 en las revistas Vimana, publicada por el CIOVE de Santander, y Cuadernos de Ufología. Pero Nacho ganó su prestigio definitivo como autor de cuatro volúmenes de lectura obligada para quienes llevan con pasión o interés profundo los temas que aborda este blog: “Entre ufólogos, creyentes y contactados: Una historia social de los OVNIS en España” (Cuadernos de Ufología, 1993), “OVNIs y ciencias humanas” (Fundación Anomalía, 2003), “Historia cultural de los ovnis en España 1950-1990” (Reediciones Anómalas, 2022) y “Así creamos monstruos” (Luciérnaga, 2023). En el plano teórico hay que destacar el prólogo que escribió para la primera edición en castellano de “Cuando las profecías fallan” (Reediciones Anómalas, 2019) de Leon Festinger, Henry Riecken y Stanley Schachter, que aborda génesis, desarrollo y derivas de un movimiento religioso plativolista, el cual dio paso a la formulación de la teoría de la disonancia cognitiva, o su monografía de 2002 sobre el curanderismo psíquico filipino.
–Háblame de tu obra artística, Nacho.
–Ahora me preguntas por los cuadros y hace un mes dejé de pintar. Aparte de cosas pequeñas, tengo tres cuadros medianos para la exposición de los viejos pintores de los ochenta, que se van a ver el 27 en el Homenaje a Esteban de la Foz. La galería es tan pequeña que no creo que nos quepa más que un cuadro mediano o dos pequeños a cada uno, pero lo importante es juntarnos de nuevo, ahora que se cumplen 40 años de la primera exposición de los alumnos de Esteban de la Foz. Es un homenaje al maestro desaparecido, uno de los mejores pintores de Cantabria. Como aquella exposición fue de paisaje urbano de Santander en un expresionismo figurativo, me ha divertido pintar eso mismo otra vez: escenas fantásticas en el paisaje urbano de Santander.
Santander Visión 2099.
Santander invadida por los monstruos.
El Juicio Final en Santander.
Ignacio Cabria es un rara avis. La antropología es para él un pretexto para ocuparse de aquello que verdaderamente le interesa.
“Los robots son el golem moderno. Son la única creación de verdad del hombre. Son el Otro antropológico de la era tecnológica, aparte del alien: la inteligencia exterior y la inteligencia artificial”, afirma ante la pregunta por qué aliens y robots.
Robots en familia.
–En realidad no son solo aliens y robots, hay también demonios, ángeles, monstruos, vírgenes, Dios… Son todas las entidades mitológicas de nuestra cultura, desde las antiguas hasta las modernas. Me encanta la iconología religiosa. Y va acompañada de astronautas, superhéroes y otra parafernalia de los terrores y la tecnología moderna: bombas atómicas e invasiones marcianas. Los paisajes de la mitología religiosa también están: la vista del infierno y del paraíso. He simplificado el álbum porque había más de esas cosas. La excepción son las reinterpretaciones del arte occidental y algunas pinturas de contenido antropológico. Pero la única razón para pintar estos temas es porque me divierte. Es pintura sin pretensiones, que tiene significados. «Muy narrativa», dirían los críticos. Es como contar historias en imágenes. Fíjate por ejemplo en ese cuadro del Cielo de los hombres y las mujeres (N. del E.: primer cuadro de la GALERIA DE OBRAS ANTERIORES, al pie de este post), que tiene tantas «lecturas», que dirían los críticos. Lecturas en cuanto a políticas de género. Quien vea eso podrá decir «qué tío más enrollao» o «qué machista de mierda. Vaya, te envío unas copias para el disfrute o el oprobio universal.»
GALERÍA DE OBRAS ANTERIORES
El Jardín de las Delicias.
Cielo de los hombres y las mujeres (collage).
Comandante de la Confederación Galáctica (collage).
Mesías del espacio (collage).
El rapto de las hijas de Leucipo.
Abducción en Guernica (collage).
Ovnis cubistas.
Colmadón galáctico.
Armagedón.
Y tú tampoco te atrevas a contradecirme.
Misión de cooperación (1).
Zombis.
La Creación del Mundo (collage).
La Creación del Mundo – Fragmento (collage).
Barbería africana.
El marciano de Vitrubio.
Los crucificados de Pampanga. Ignacio escribió un breve artículo sobre esta peregrinación en una encarnación anterior de este blog que solía llamarse Dios! (www.dios.com.ar)
Mural. El techo del trastero de su hogar también quedó a merced de los pinceles del artista.