Feinmann lo hizo de nuevo
Hace poco celebrábamos en este blog el programa «¿Fuimos a la Luna?«, que pone blanco sobre negro el exitoso Proyecto Apolo que llevó al primer hombre a caminar sobre nuestro satélite en Julio de 1969. El pasado domingo, Página /12 le hizo dar a Neil Armstrong y al programa que permitió la conquista espacial varios pasos atrás.
En un suplemento pomposamente titulado Crítica de la Razón Imperial, José Pablo Feinmann reedita, reforma y amplía un viejo ensayo (porque ahora parece un cuento) donde pretende que la realidad tal como la conocemos es mera construcción mediática. Este argumento podría ser más o menos aceptable o más o menos discutible. Pero Feinmann, que podría haber presentado otros ejemplos (como la “inexistencia” de muertos civiles en Afganistán e Irak, o de cuerpos en los atentados del 11-S) remite al programa Apolo. Bajo el título «La Colonización de la subjetividad. El poder mediático y la construcción del sujeto-Otro», leemos: El viaje a la Luna no ha tenido lugar. Le hace decir a su admirado Baudrillard (le llama «Jean», como si hubiesen sido compañeros de potrero) frases como esta:
Este esperpento (colmado de obviedades y sin embargo pretencioso) tuvo una versión original abreviada y, si esto fuera posible, peor escrita, que fue publicada en el mismo diario en Julio de 2009.
A falta de tiempo para desarrollar ampliamente el tema, refiero al lector a la reseña publicada en Magia Crítica, aún vigente pese a que hizo desaparecer a algunos protagonistas, como Francisco de Narváez, que en aquella ocasión simulaba un cierre de campaña en el planeta Júpiter. Ahora exageró el protagonismo de otros, como Henry Kissinger o Stanley Kubrick, en unos diálogos tan baladíes y estereotipados que dan pena. (Cada día me convenzo más de que José Pablo es a la profundidad intelectual lo que Claudio María a la honestidad espiritual.)
Si el lector alguna vez buscó algún caso patente de boludo ilustrado, probablemente estamos ante uno de los ejemplos más flagrantes –Feinmann se presenta como filósofo-. En otro sentido, la serie puede ser material de consulta y hasta de estudio.
Sin duda, el comentado no será el último ejemplo. El suplemento continúa.
A propósito de J.P. Feinmann se puede leer también «Bloggers, una apuesta a la reflexión crítica«.